Lo que más me gusta en el mundo, es viajar. Echando la vista atrás, me ha sorprendido que durante estos dos años, desde que me diagnosticaron cáncer de mama, no he parado de viajar. ¡Es impresionante la fuerza que he tenido durante el proceso! He viajado desde la segunda quimioterapia y no he parado ¡más de 25 desplazamientos! La mente es muy fuerte, tenemos más poder del que nos podemos imaginar. Mucha gente me dice que lo he podido hacer porque me encontraba bien, que si no, no hubiera podido viajar, ni hacer tantas cosas como he hecho. Mi respuesta siempre es la misma, me encontraba bien porque me lo he currado y mucho, no he parado de hacer cambios para mi bienestar, incluso hacía cosas que no me apetecían pero sabía que eran buenas para mi cuerpo y para su curación. Sinceramente, me hubiera sido más fácil y cómodo no hacer absolutamente nada y quedarme en mi zona de confort quejándome de mi mala suerte.
Hecho=Interpretación=Acción=Resultado Esta es mi ecuación. Todos tenemos la capacidad de realizar cambios, cambiar nuestras creencias, nuestros actos, pensar diferente.